Vojanův dvůr (el patio de Vojan) se inspiró en la cocina tradicional checa y en la cultura cervecera, dándoles un toque moderno, sin ese ambiente sombrío con el que cuentan muchas veces las tabernas checas. Es un restaurante y cervecería del siglo XXI que cuenta con diferentes espacios. El pequeño Formanka, con capacidad para 40 personas, cuenta con seis grifos para diferentes tipos de cerveza local de la excelente cervecería U Tří růží y de otras cervezas tipo Pilsen de barril. También cuenta con el Konírna (establo), el cual fue adaptado para acoger eventos más grandes, con capacidad para 70 personas. Los techos abovedados nos recordarán que estamos en un edificio histórico, donde se ha escrito la historia.
En el verano podemos disfrutar del jardín, equipado con parasoles y listo para acoger hasta 140 amantes de la cerveza. Aquí encontraremos tanto locales como turistas.