Desde su fundación, este modesto teatro praguense ha acogido géneros teatrales poco convencionales: cabarets, espectáculos de variedades, operetas y musicales.
Fundado en 1881, quince años después del incendio que devastó el recién construido Teatro Nacional a orillas del Moldava, el Teatro Musical Karlín estaba inicialmente amueblado con mesas, que fueron sustituidas en 1932 por un escenario clásico. En aquella época tenía capacidad para casi mil espectadores, y hoy es el segundo teatro más grande de Praga. La inundación de 2002 dañó la rica decoración neobarroca, que ha sido renovada.
La compañía de Teatro Musical Karlín se instaló en el edificio en 1945. Producía sobre todo operetas y musicales, que conquistaron rápidamente al público y tuvieron un gran éxito comercial. El Teatro también acogió a un gran número de compañías, conjuntos, artistas de circo y actos de todo tipo. El músico, compositor, actor y director Karel Hašler es sin duda la personalidad que más ha influido en el Teatro.