Las cocheras de tranvías de Střešovice estuvieron en activo desde 1909, fecha de su apertura, hasta 1992, año en el que quedaron reconvertidas en Museo del Transporte. En la actualidad alberga cerca de cincuenta vehículos, así como una colección de objetos prestados por el Museo Nacional de la Técnica y el Museo Municipal de Praga.
Como curiosidad, cabe señalar que a finales del siglo XIX cualquier conductor que tuviera un retraso en su horario quedaba despedido. El museo presenta una exposición permanente sobre la historia del transporte público en la ciudad de Praga, destacando las fotos de época, documentos, billetes, planos y vídeos procedentes del Archivo Cinematográfico Nacional. Los aficionados al transporte público tienen aquí su paraíso; aquí verán los tranvías hipomóviles, antepasados de los tranvías actuales, así como los primeros vagones eléctricos de Bohemia, que datan de 1891, o una maqueta del tren Tatra R1, de principios de los 70 y destinada al metro de Praga. ¡Y los que prefieran los autobuses o trolebuses tampoco se quedarán con las ganas!