El local donde se encuentra actualmente el restaurante Olympia, de la cadena Kolkovna, ha albergado distintos restaurantes desde su construcción, a principios del siglo XX. Se dice que incluso ha habido aquí una sala de juego secreta para los aficionados a los juegos de azar. En 2003 el restaurante adoptó su aspecto actual, tras una reforma en la que se recurrió a materiales como la madera, muebles retro y cubas de cobre. El menú consta, sobre todo, de platos de carne. Son de destacar el gulasch de buey, la pierna de cochinillo, las carrilleras de cerdo al vino o el lomo de jabalí.
El servicio es rápido, los camareros pasan constantemente con incontables jarras llenas de una Pilsen tirada con mimo. También se merece una mención la charcutería, como por ejemplo las salchichas a la cerveza las salchichas blancas o los productos con carne de caza. Para acompañar la cerveza, una buena opción son las especialidades más aromáticas, como los quesos empanados de Loštice o las wurst a la cerveza.