Al contrario que los otros clubes de jazz de Praga, situados en bodegas medievales del centro, el Jazz Dock ha decidido instalarse en el río. Es uno de los pocos establecimientos de la ciudad con el privilegio de ocupar un embarcadero, situación que le garantiza unas vistas incomparables a la ciudad de las cien torres.
La programación del Jazz Dock es también excepcional, sobre todo en sus horarios: el primer concierto empieza a última hora de la tarde (a las 19:00h), mientras que el segundo empieza a las 22:00h. En general, suele haber formaciones diferentes en cada concierto. A este club no se viene solo para escuchar conciertos de jazz, sino también a disfrutar de rock acústico y canciones, así como teatro, todo ello de gran calidad. Resumiendo, el Jazz Dock no es una trampa para turistas, sino un auténtico club musical, con unos precios aceptables y donde el visitante viene a divertirse.