¿Dónde más podríamos encontrar un restaurante con este nombre sino cerca a la embajada de Francia? El Café de Paris no cuenta con muchos platos dentro de su menú, pero esto poco importa: la mayoría de comensales vienen a disfrutar del famoso entrecot Café de Paris, acompañado con su salsa especial, patatas fritas, ensalada y baguette o sino una deliciosa sopa de cebolla.
Aquí encontraremos el ambiente de un restaurante parisino en casi todos los detalles de este establecimiento: en la música, los espejos omnipresentes en las paredes, así como en las mesas puestas afuera con sus sillas, en la cuales podremos calentarnos un poco, gracias a las mantas provistas para esto.
En el menú de vinos encontraremos sobre todo vinos franceses y, obviamente, champán. También encontraremos calvados, pastís y otra bebida clásica: el kir royal.
Cuando visitemos el Café de Paris no esperemos platos sofisticados ni con una decoración compleja. Es un lugar al que iremos ya sea para un almuerzo rápido o para disfrutar de una agradable noche con nuestros amigos.